La lectura desde la primera infancia es una de las herramientas más poderosas que tenemos para apoyar el desarrollo de los niños. No solo les ayuda a aprender, sino que también fortalece el vínculo emocional entre padres e hijos.
Cuando los padres leen a sus hijos, crean un ambiente de amor y seguridad, lo que permite que los pequeños se sientan valorados y comprendidos. Además, la lectura temprana estimula el desarrollo del lenguaje, la imaginación y el pensamiento crítico, preparando a los niños para el éxito académico y personal.
Desde los primeros meses de vida, los cuentos y libros ilustrados capturan la atención de los niños, despertando su curiosidad y fomentando una relación positiva con la lectura. Al compartir historias y aventuras, los padres y sus hijos construyen recuerdos duraderos y establecen una base sólida para un futuro lleno de aprendizaje y descubrimientos.
La lectura conjunta se convierte en un momento especial de conexión, donde las palabras y las ilustraciones toman vida y enriquecen el mundo interior del niño.
¡Dale a tu hijo un libro y desarrollarás en él un futuro brillante! 📖📖